Por César Del Pardo Gutiérrez
Hermosillo/VM, 3 de abril.- Desde hace años, la
izquierda de Sonora padece un serio problema: la simulación; y esto es antes de
la caída de famoso Muro de Berlín; ya en la década de los ochenta el PRT
histórico anunciaba su retiro de la manera más trágica; exploto con tanta
corrupción; su etapa heroica, termino casi aplastada por los actos de
corrupción de casi todos sus dirigentes principales.
Después de la tragedia, llovió sobre mojada; un
grupo de trotskistas o más bien ex trotskistas, que fueron desplazados del PRD
se fueron a las oficinas de la CUT y ahí están desde la década de los ochenta;
es decir desde hace treinta años; con Enrique Carrera pues; el mismo que todos
saben trabaja como interlocutor del gobierno en turno en Sonora para mediatizar
y entregar movimientos sociales.
Enrique no es un sindicalista formal; digamos
en el sentido estricto, sin embargo no ha sido impedimento para que se
prácticamente el interlocutor de las movilizaciones sindicales ante el Gobierno
del Estado; así fue con los mineros de Cananea y ahora con la huelga de la
UNISON.
Hace tiempecito atrás se formo lo que se
conocía o se conoce como la Mesa de Solidaridad con los Movimientos Sociales,
ahora al parecer se llama Consejo Sindical y Social Permanente del Estado de
Sonora; es evidente que el agregado de “Social” implica pues corporativizar a
los movimientos espontáneos que se presentan en Sonora; ese pues es el objetivo:
que nada se salga de control.
Nadie puede engañarse que cuando se hacían las
marchas de la famosa Mesa de Solidaridad, algunos muy gritoncitos cuando
llegamos al Palacio de gobierno ni “chistaban” y solo entraban con el
funcionario en turno, Jorge Rountree,
Sergio Tolano y por supuesto acompañados por Enrique Carrera; a la vista de
todos y sin empacho los funcionarios estatales le hablaban a Carrera para que
eligiera la comisión; de ese tamaño
están las cosas.
Bien; hace años, pero muchos años, que un
movimiento social en Sonora no se sacude esta interlocución, sin embargo lo que
vimos este pasado primero de mayo ya da signos de preocupación; esto no puede
seguir así.
Platique con algunos maestros universitarios,
(pero maestros, no aviadores e ignorantes que por razones ideologías en los
años ochenta se quedaron con plazas sin merecerlas académicamente) y me
dijeron, me afirmaron y me comprobaron (sin tener necesidad de hacerlo, su
palabra bastaba) que muchos que la hacen de radicales no solo son aviadores
sino que incluso en muchos de los casos han traicionado a los propios
movimientos reivindicativos de los trabajadores universitarios.
Algunos mas bromeaban y decían que la táctica
del Frente Único que planteaba Trotsky como algo transitorio y en breve etapa,
algunos trotskistas lo “modernizaron” con una periodo de larga duración y que
esa son las razones de su permanente alianza con este (sin duda) agente del
gobierno en el seno del movimientos social.
Ahora bien ¿La huelga de STAUS no necesita convencernos
moralmente? ¿No se da cuenta los dirigentes con quien andan agarrados de la
mano por las banquetas? ¿Puede haber actos de protesta contra cualquier
imposición sin ver nuestros propios actos?
Sin duda llego la hora de llamar las cosas por
su nombre; no se puede marchar ni protestar con quienes no tiene ni
independencia de clase ni demandas de la
mismas ¿Por qué tener una interlocución con un personaje que su vida política
esta a los ojos de todos? ¿Tendremos que
renunciar a la movilización popular como fuerza motor para cualquier
interlocución? ¿O estamos frente a una generación que ya claudico y que se ha
dedicado a administrar el descontento?
La simulación de la vieja izquierda sonorense
un es anuncio categórico del cierre de un ciclo; ahora hay tareas; hay que
formar nuevos liderazgos y esto; es posible hacerlo: hay condiciones.
Estamos a tiempo de ver otro primero de mayo…
E-mail: vaceif@gmail.com
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